El coronel de la Policía Rafael Herrera Peña, vinculado por las autoridades en la muerte a tiros del exrector Mateo Aquino Febrillet, estaba siendo investigado por pertenecer a una red de lavado de activos que usaba personas para el retiro de alta suma de dinero, por lo que su teléfono estaba intervenido por autorización judicial. El dinero procedente del narcotráfico era retirado en empresas remesadoras, para adquirir propiedades.
La red a la que estaría vinculado el coronel recluta personas físicas y jurídicas de gran poder económico en el país, para lavar dinero y propiedades obtenidas de forma ilícita, según el fiscal adjunto Adolfo Féliz Pérez.
El tipo de empresa preferido por la red de la que según el fiscal el coronel Herrera Peña forma parte, son los dealers de vehículos de lujo, constructoras, bienes raíces y trabas de gallos. La investigación sobre lavado de activos la lleva a cabo el fiscal adjunto Féliz Pérez, que mediante una orden judicial le tenía intervenido al coronel Herrera Peña el teléfono 809-222-3579, autorizada por la jueza Arisleyda Méndez Batista, mediante el auto 109-enero-2016.
Se trata del mismo teléfono que mantuvo conversación con Blas Peralta cuando hizo la propuesta de cambiarle el cañón a la pistola que utilizó este últimolta para dispararle al vehículo en que iba a bordo Mateo Febrillet.
De acuerdo a las investigaciones que lleva a cabo Féliz Pérez, han podido determinar por medio de vigilancia, chequeo de archivos, operaciones de inteligencia y otras fuentes de información, a unos conocidos como Ariel, Ayala, Romero, José Castillo, Endy, Diógenes (Yuyo), Roquelin Miguel, Darío y Rafelín, “que componen una organización criminal”.
En sus operaciones la red utiliza varios números telefónicos entre los que figura el del coronel Herrera Peña.
El fiscal investigador tiene vídeos y captación de voz de los miembros de la red.

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