NUESTRO CEMENTERIO ES UN MONTE QUE NO TIENE DOLIENTES

 A raíz de la muerte de mi amigo Vincent, fui a darle el ultimo adiós al cementerio nuevo y que tristeza doble sentí, primero ver a mi amigo por ultima vez y luego por lo arrabalizado de este Camposanto, parece ser que nadie se preocupa por su limpieza y por mantener este terreno apto para que los familiares vayan a limpiar las tumbas y llevar flores.

El desorden que existe es grande, allí los arboles deben ser podados, debe desyerbarse y tener mas organización cuando se asigna una porción de tierra destinada para enterrar una persona, yo creo que es tiempo de que se organice una brigada permanente para que este cementerio sea acondicionado y ademas se re-organice el mismo.

Me atrevería a afirmar que es mas barato pagarle a una brigada que se encargue de este campo y lo mantenga limpio, que pagar chabacanería y fiestas a personas que no dan beneficios a este pueblo. pero estamos muy claro de que LOS DIFUNTOS NO EJERCEN SU DERECHO AL VOTO, quizas por eso no hay voluntad de lo que se requiere allí.